El cazo que arrastra Lorenzo, que le complica la vida, con
el que tropieza y se le enreda a cada paso, no es más que una metáfora sobre la
dificultad de realizar cualquier sencilla tarea para las personas con
discapacidad.
A Lorenzo le gustaría librase de ese “cazo”, porque a menudo
las otras personas le tienen miedo y aunque tiene un montón de cualidades, no
las aprecian, sólo se fijan en su cazo..
Con la ayuda de una
persona extraordinaria conseguirá expresar su talento y no atascarse en
todas partes y aunque el cazo no desaparece se hace más discreto.
El libro, con dibujos sencillos y divertidos, nos ayuda a entender mejor la discapacidad y
nos invita a ser una de esas personas extraordinarias capaces de descubrir y
valorar el potencial de las personas que tienen que realizar el doble de
esfuerzo para sobrellevar el día a día.
-Ana Jesús-
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